De repente tengo una idea.
Aunque quizás, no estoy seguro,
decir idea sea demasiado.
Las ideas deberían ser
siempre claras, transparentes
desde el momento en que nacen
o directamente no ser.
Yo no suelo tener ideas claras.
Tengo más bien impresiones difusas,
sensaciones, ensoñaciones,
pesadillas algunas veces,
conmociones así,
como estremecimientos.
Amor, miedos, desconciertos...
Sí, desconciertos.
Profundos e inquietantes.
Y en ciertas ocasiones
extrañas e imprecisas empatías.
Tal vez he lastimado a mucha gente
por no haber sabido comprender
todo esto a su debido tiempo.
-No te entiendo, dice alguien.
Noto en este decir la resignación,
la actitud de quien renuncia al intento.
Me pregunto si no será demasiada
pretensión llegar a comprender
verdaderamente a alguien.
Acaso se trate en realidad de otra cosa.
No de entender, sino de acompañar,
especialmente allí donde no se comprende.
domingo, marzo 05, 2017
Incomprensión
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario