lunes, abril 18, 2016

Soledades

Cada persona en el mundo está sola.
Quienes pese a ello son felices, es porque no saben,
porque no toman conciencia de la abrumadora
soledad que pende sobre sus cabezas.
De vez en cuando, dos de estos seres solitarios
se ponen de acuerdo para hacer parte del camino juntos.
Creen que así estarán menos solos; pero no,
todo es apenas un espejismo estéril.
Nadie podrá jamás ocupar el lugar del otro,
sentir por otra persona dolor, esperanza o alegría.
Vivimos en medio de una ilusión:
la de estar compartiendo todas estas cosas.
Es verdad que cuando alguno hiere a alguien más
ese contacto se convierte en algo real,
tan real como una herida.
Pero incluso así, nada sabe quien hiere
del dolor que siente aquel que ha sufrido su herida.


No hay comentarios.: