jueves, enero 09, 2014

Lo que yo quería

No era algo tan extraordinario lo que yo quería. O al menos en su momento no me pareció algo tan extraordinario. Simplemente deseaba cuidar de alguien que a su vez cuidara de mí. Eso era todo. Creí que sería algo sencillo de encontrar. Pero no. Las cosas nunca son tan sencillas como parecen, cuando parecen sencillas. Es la soledad lo que impera en el fondo de la naturaleza del ser humano. No las recíprocas compañías. Después de todo morimos siempre solos. Nadie puede vivir la muerte de otro puesto en su lugar.

No hay comentarios.: